domingo, 8 de noviembre de 2015

RAMÓN CABANILLAS: Si las piedras hablaran

Una biografía pegada a Cambados



Casas, plazas y calles que frecuentó el poeta conforman un itinerario que permite descubrir al autor y su obra así como el casco histórico de la villa

 

Que Cambados es la cuna de Ramón Cabanillas es de conocimiento general, lo que quizá no saben muchos arousanos, cambadeses incluidos, es la estrecha relación que guarda la obra y la vida del poeta con su villa natal. Si las piedras hablaran, todavía quedan muchas en pie que podrían dar testimonio de la biografía del autor de No Desterro. No obstante, no faltan voces para hacerlo. Los cambadeses Xoán Antonio Pillado y Manuel Núñez saben mucho de esta relación de Cambados con su poeta y la han hilvanado en una ruta que permite recorrer buena parte del casco histórico-artístico.
No es un invento de ahora. Ellos y otros se han interesado antes por articular este legado cultural en torno a rutas que se despliegan desde Fefiñáns a la rúa Hospital y desde A Pastora hasta A Calzada.
Atractivo turístico
Algunos ya conocían el Cambados de Cabanillas, otros lo descubrieron ayer gracias a la salida organizada por el Concello de Cambados dentro del programa de actividades dedicadas al centenario de Vento Mareiro
.
Su legado es, sobre todo, literario, pero a nadie se le escapa que el mundo de las letras puede actuar también como reclamo turístico. El caso más representativo es el de Stratford y Shakespeare pero, sin tantas pretensiones, hay ejemplos más cercanos como el de Vilanova y Valle-Inclán.
Siguiendo la estela de la vida y obra del Poeta da Raza se puede descubrir todo un Bien de Interés Cultural: desde el monumentalidad de Fefiñáns hasta el romanticismo de la ruinas de Santa Mariña, pasando por las plazas de Alfredo Brañas y Francisco Asorey. Junto a la casa natal, el monumento que hay en el Paseo da Calzada es quizá la referencia más conocida del escritor en la localidad. Allí se realiza cada año la ofrenda floral por el Día das Letras Galegas y por allí pasan miles de personas que, al menos una vez, se habrán fijado en el A ti meu Cambados labrado sobre la piedra.
A juicio de Xoán Antonio Pillado, «a xente coñece mal e pouco» la huella de Cabanillas en Cambados y salidas como la de ayer contribuyen a divulgar esa parte de la historia local que no siempre se atiende en las escuelas.
A través de la asociación de profesores Candea se llevaron a cabo varias iniciativas en este sentido y la concejalía de Cultura, que dirige Víctor Caamaño, quiere potenciar también esta faceta del Ramón Cabanillas más pegado al terreno con fines culturales y turísticos.
De ruta de la mano de ramón Cabanillas

Versos para el escultor y el político

En la ruta es obligada la parada en la plaza de Asorey, en Fefiñáns. El poeta le dedicó unos versos al autor de «A Naiciña» con el que lo unía su relación con Cambados. La ruta trazada por Pillado y Núñez también hace parada en otra plaza con nombre propio: la dedicada al político y escritor Alfredo Brañas, con quien el Poeta da Raza también tuvo relación.

Una comida en la Casa de Fraga

Esta casa, hoy convertida en biblioteca municipal, también forma parte de las vivencias de Cabanillas. Allí asistió en 1912 a una comida que le organizaron sus amigos cuando este regresó de su primer viaje de Cuba. La casa de Furruxa, como la conocen los más veteranos, tiene otra ligazón con Cabanillas. Su biógrafo, Luis Rei, le da ahora nombre.

Mañana se descubre la placa

En la casa natal hay una placa pero no en la vivienda en la murió en 1959. El Concello va a reparar esta carencia mañana (18.30 horas), con el descubrimiento de una placa en la hoy casa de Botana, situada en la calle Hospital. Justo al lado está la taberna O Galo Negro, fundada por el nieto del escritor, que tomó el nombre de un poema de Cabanillas.

En el corazón de Fefiñáns


Ramón Cabanillas nació en 1876 en una humilde vivienda de tipologá marinera situada en la rúa Novedades. El Concello la rehabilitó hace años y la convirtió en casa-museo pero el paso del tiempo provocó que cayera en desuso y hoy a penas se abre. La casa natal contiene mobiliario de la época en que vivó Cabanillas y algunas publicaciones del autor.

FUENTE:  La Voz de Galicia


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